- La compañía ha destacado el papel fundamental que juega la información en la búsqueda de la eficiencia energética.
- Para Ignacio Abati, director general de ISTA, la principal incertidumbre es qué va a hacer el Gobierno español en su transposición, y la posterior aplicación efectiva en el mercado.
ISTA, compañía líder en soluciones para la gestión eficiente de la energía en los edificios y su contabilización individual, ha aplaudido la reciente aprobación de la nueva versión de la Directiva Europea de Eficiencia Energética de Edificios (EPBD). La actualización de esta norma tiene como principal objetivo la drástica reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y el consumo de energía en el sector de la construcción de la UE para el año 2030.
También persigue que se alcance la neutralidad climática para 2050, gracias a la rehabilitación de los edificios menos eficientes y en la mejora del intercambio de información sobre su rendimiento energético. Según esta normativa, los Estados miembros deberán tomar medidas concretas para descarbonizar los sistemas de calefacción y refrigeración y eliminar progresivamente el uso de combustibles fósiles hasta 2040.
Ignacio Abati, director General de ISTA, cree que “es una muy buena noticia que desde la UE se apoye a los países a desarrollar legislaciones como la de la promoción y preparación de los edificios para que puedan convertirse en inteligentes". Para ista una de las características más alentadoras de la nueva Directiva es la disposición que exige que los edificios nuevos o rehabilitados instalen sistemas de monitorización y control de sus consumos. “Esta cuestión técnica es una magnífica noticia, ya que será buena para el sector y, si se hace bien, para las familias. Pero, sobre todo, dará transparencia a esos datos de consumo a los propietarios y administradores, tal como se deduce del artículo 13 de la propia Directiva”, manifiesta Abati.
En consonancia con el compromiso de ISTA con la transparencia, su director general ha destacado el papel fundamental que juega la información en la búsqueda de la eficiencia energética: "Cuanta más información tengamos las familias sobre cómo, cuándo y dónde gastamos nuestro dinero en la energía que consumimos, más haremos para ahorrar". En este sentido, subrayó la importancia de soluciones como Sophia, que ofrecen transparencia total a las comunidades de propietarios, vecinos y administradores, así como a las empresas gestoras de la calefacción.
Abati también ha elogiado las propuestas de ahorro energético derivadas de la contabilización individual de calefacción en edificios existentes, destacando su contribución a la transparencia y al ahorro. “Hasta ahora, y debido a una legislación que, en nuestro país, cuenta con grandes lagunas, la individualización de consumos solo ha funcionado a medias y tan solo se ha realizado en el 35% de los edificios con calefacción central que debían implementarla”, reconoce.
Pero junto a las buenas noticias, el texto contiene para ISTA, algunos interrogantes que deberán abordarse con prontitud. Para Ignacio Abati, “la principal incertidumbre es qué va a hacer el Gobierno español en su transposición, y la posterior aplicación efectiva en nuestro mercado, que tiene que ser dentro de dos años. En la experiencia que tenemos con de la Directiva de Eficiencia Energética de 2018, es que se pierden oportunidades de ahorro si se realiza una adaptación poco definida”. Desde la compañía también se insiste en que la transposición de la norma y su aplicación por parte de las Comunidades Autónomas sea lo mejor posible para que todas estas medidas lleguen a las familias y se posibilite el mayor grado de ahorro posible.
ISTA se compromete a seguir colaborando con las autoridades y las partes interesadas para implementar de manera efectiva las disposiciones de la nueva Directiva de Eficiencia Energética, con el objetivo de promover un futuro más sostenible y eficiente en el ámbito de la energía en los edificios.